No me preguntes el porqué, pero hoy siento tristeza
mis ojos no sonríen, no siento que brillen
me siento apagada, como sin ganas
me pesan las horas, me faltan las fuerzas.
No me preguntes el porqué, pero hoy siento melancolía
me asaltan recuerdos traspasando paredes
no tengo consuelo, no tengo pañuelo
que tape las penas que a mi alma vuelan.
No me preguntes el porqué, pero hoy siento nostalgia
de un tiempo que pasó y jamás volverá
de unos besos que me entregaban y yo recibía
poniendo en ellos todo mi amor y mi energía
No me preguntes el porqué, pero hoy siento abandono
sintiendo que con tu partida mis labios ya no sonríen
las horas de mi reloj son lentas, intranquilas
han perdido los acordes que formaban su melodía.
No me preguntes el porqué, pero hoy siento dolor
por unos ojos que antes me miraban
y hoy me ocultan su profunda mirada
cubriendo mi vida de una negra y espesa ceguera.
No me preguntes el porqué, pero hoy siento abandono
que sumerge a mis días en un absoluto silencio
cubriendo unas noches que lloran y gimen
desgranando deseos que mi cuerpo todavía añora.
No me preguntes el porqué, pero hoy siento necesidad
de unos brazos que me ayuden a mantenerme en pie
que me hagan sentir que aún sigo viva
que puedo hacer latir de nuevo un corazón por mí.
No me preguntes el porqué, pero hoy siento temor
de que mi piel no vuelva a sentir otra piel
y mis labios no sientan jamás otros labios
que mi voz no vuelva a temblar al decir un te quiero.
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