domingo, 4 de octubre de 2015

"EN LAS HORAS ETERNAS"






En las horas eternas de 
 una noche en soledad,
el silencio acude a la llamada
de una voz vacía,
sin palabras ni eco
solo el sabor amargo del recuerdo,
tiembla el corazón y se agita el alma
el tiempo se encadena a la piel,
que temerosa espera el final
que sin piedad en le espejo se refleja,
impaciente se rebelan 
los amargos recuerdos de la distancia,
las horas del reloj se detienen 
negándose a seguir pasando,
suspira y no es extraño
pesan los pensamientos y los eslabones
que los van encadenando
marcan el paso, lento y amargo
del camino que sembrado de amargura
abraza los llantos que marcan destino
y lentamente se convierten en humo,
que va desapareciendo en compañía
de la más cruel de las indiferencias, 
empapada la piel de partículas 
azules de tristeza, 
perdida la mirada de unos ojos
vacíos, secos, ocultando en sus cuencas
la ceguera impuesta por la ingratitud
del desaliento y el abandono
de sentimientos que partieron 
acompañados en su huida por el viento,
dejando las horas eternas
de una noche en soledad.