En mis sueños pronuncio tu nombre
el porqué no lo entiendo
prometí no volverlo a pronunciar
pero en mis sueños no mando
ellos no saben de promesas
en ellos no caben los pretextos
son libres nadie los reprimen
nadie en ellos mandan
caminan en silencio
pero hieren en lo más profundo
se clavan haciendo huellas
se meten en tus entrañas
se apoderan de tu alma
te dejan a merced de sus deseos
cual veneno introducido en tus venas
que se desliza por tus arterias
y se clava en mitad de tu corazón
intentas que no vuelvan otra noche
pero ellos vuelven a instalarse en tu mente
burlándose de tus intentos de deshacerte de ellos
saben como herirte, como doblegarte
dejando figuras en tu mente
que tú con fuerza quieres olvidar
deslizándose como una ruleta
dando infinidad de vueltas
ingrato sueño que me deja indefensa
a unos deseos inmensos
que siendo consciente yo niego
pero en mis sueños no consigo doblegar.
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